Entre el Mar y la Montaña, la editorial

Por: Yisel Reyes Laffita

Más de siete mil ejemplares de 13 títulos publicados por la editorial El Mar y la Montaña estarán a disposición de los guantanameros en los pabellones de la XXI Feria Internacional del Libro, que desde el 29 de febrero y hasta el próximo día 4 se celebra en esta provincia.

Los textos, en su mayoría de autores guantanameros, agrupan diferentes géneros y temáticas literarios como la poesía, infantiles, historia, narrativa…

Esta casa, que desde el 2000 dedica cada minuto al trabajo de los escritores del territorio, al igual que otras de su tipo en diferentes provincias, se creó por iniciativa del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, para responder a los reclamos de muchos de ellos en los municipios que no tenían acceso a las grandes editoriales, concentradas la mayoría en la capital del país.

Desde ese año El Mar y la Montaña ha publicado unos 186 títulos, de más de 150 autores, que significan cerca de 90 mil ejemplares, de cuya revisión, edición, diseño e impresión se encargan sólo nueve trabajadores, en un pequeño local de dos pisos, en Calixto García entre Crombet y Emilio Giró.

Puertas adentro

“Aquí hacemos libros fundamentalmente de escritores guantanameros, los cuales se recepcionan en el Centro de Promoción del Libro entre enero y el 30 de junio de cada año, de ahí son evaluados por un colectivo de lectores especializados que decide si son publicables o no”, explica Yaimara Diéguez Gutiérrez, especialista principal al frente de la editorial.

“Los que se rechazan se devuelven a sus autores con recomendaciones para su corrección, con la posibilidad de que puedan presentarlos de nuevo, los aprobados pasan a formar parte del plan de publicación, que se organiza con un año de antelación”, precisa la editora.

De esa manera comienza a dársele vida al libro, los cuales se distribuyen a las cuatro editoras Mireya Piñeiro Ortigora, Cecilia Elías Guerra, Carelsi Falcón Calzadilla y Diéguez Gutiérrez, según la cantidad, género y temática que aborden.

“El tiempo máximo que debe permanecer un editor con un texto en su poder no debe rebasar los tres meses, requisito muy difícil de cumplir, porque si a uno solo le entregas cinco libros se demoraría 15 meses para su edición, y estos no pueden estar más de un año en ese proceso, sin contar los restantes pasos”, comenta la especialista principal.

Cuando llegan a la editorial, siempre entre 10 y 20 ejemplares, después de ser minuciosamente ojeados por las editoras, se someten a la corrección, edición, diseño y finalmente a la impresión y encuadernación, pasos que en su mayoría son manuales.

“Hemos ganado mucho en calidad, especialmente de la cubierta, primero porque ahora se hacen en cuatricomía (4 colores), en el poligráfico Juan Marinello, y segundo por el perfeccionamiento del diseño, que se ha ido adquiriendo con la experiencia del diseñador”, dice Diéguez Gutiérrez.

Páginas de amor

Para Víctor Enrique Sánchez Silveira (Diseñador) y Marcial López Romero (Impresión y encuadernación), ambos fundadores, confeccionar un libro más que eso, es pasión, celo y amor.

“Aquí nace un libro”, dice cariñosamente Sánchez Silveira, para quien 21 años en la profesión lo han forjado para cumplir con calidad la tarea que hoy tiene en sus manos:

“Colaboro con Geocuba, El poligráfico, Gaviota, pero nunca podría renunciar al trabajo del Mar y la Montaña, es mucho más completo e integral, lo que exige ser mejor profesional”, confiesa.

“El reto es alcanzar la perfección, y la nueva cubierta me permite ser más creativo en el trabajo con las fotografías, los dibujos… lo que me gusta y me hace sentir feliz”, dice, mientras López Romero, en el piso de abajo, le solicita la parte que le toca imprimir.

“He tenido la suerte de asumir diferentes tipos de impresión, desde la Chandel (máquina de pedal) hasta la Riso (la más moderna en la provincia), experiencia con la que he aprendido aquí la parte más científica del libro”, asegura.

“Soy muy celoso con mis equipos -dice-, son muy sencillos, no me gusta que los toquen, por lo tanto hay que tratarlos con amor, yo sé cuando tienen algo, si suenan diferente, si hay que repararlos, me comporto como su propio médico”, confiesa.

Casi 12 años cumple esta Casa editora guantanamera, los que en vez de envejecer a su colectivo, los estimula a ser mejores creadores y complacer a los lectores, como lo hacen en la actual Feria Internacional del Libro donde se comercializan más de seis mil ejemplares salidos de sus laboriosas manos.


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