La guitarra se quedó sin cuerdas

Por: Yisel Reyes Laffita

Aunque las bases del concurso nacional de guitarra popular no excluía a nadie y estuvieron abiertas para todos los profesionales e intérpretes de la provincia, sin límite de edad, especialmente para los vinculados a las Casas de Cultura y a los Centros Provinciales de la Música, resulta inadmisible que de los mucho más de 50 guitarristas con que cuenta Guantánamo, incluidos solistas y de agrupaciones de diferentes formatos, sólo cuatro se inscribieran para participar.

Cuando el daño ya es irreparable, es oportuno llamar la atención al respecto porque además del orgullo de representar a la provincia en un certamen de esa índole, que incluso pudiera llegar al nivel nacional, nuestros guitarristas debieran sentir mucho más amor por lo que hacen y no temor por acompañar a un solista, según dijeron sus organizadores en Guantánamo, a no ser que estos últimos quieran justificar la inasistencia a la falta de mayor divulgación. Sigue leyendo